Ni siquiera es que sea malo, es un poco abrumador, raramente no es costumbre en mi, no me gusta estar trabajando y estudiando a la vez, no me gusta que todos los días sienta lo mismo o mejor dicho no pueda sentir lo mismo... es eso simplemente. Por eso me molesta... por eso quiero un cambio, así como los de antes, cuando todo era más incierto que ahora pero cada día era sorpresivamente extraño y si bien llegaba con el mismo cansancio que ahora a casa las razones eran peculiarmente distintas. Está en mis manos el cambio, y nunca más literal... en mis manos. Pero es que se me escapa, se me va... y además nada me asegura que será lo que realmente quiero... y no me siento mal, sólo abrumada, por que mañana si que si y eso me desespera un poquito, por que la quiero, por que le soy eternamente agradecida por todo lo que ha hecho por mi en todos estos años que la conozco mmm... nueve si no me equivoco... si nueve años y muchas más cosas extrañas que trecientos sesenta y cinco días multiplicado por nueve. Mi fe está toditita en ti.
Y me quiero escapar, aunque siento que se me escapa y se me acaba el tiempo. Y me voy a Valpo a tomar aire, pero recuerdo de la última vez que estuve allí y como dió un vuelco a mi vida ese momento, como estaré en esos mismos lugares viendo las cosas de otra manera, sabiendo lo que nunca esperé saber por que en realidad no quería saberlo. Ufff ese día fue crucial para empezar a cerrar una etapa. Por que ahí de nuevo... realmente lo quiero?.
Yaaaa quiero una pastilla para el dolor de cabeza, y otra para el dolor de estómago, otras más para mantenerme sana y sonriente, y alguna que lamentablemente no existe para el corazón... en momentos siento que se marchita como las flores en otoño y que se va a caer como las hojitas y es cuando no dejo que eso me gane, pero siendo sincera quiero algún remedio para ello. No hay nada sentir que tus pasos van juntos con otros.
Fuerza amiga.
Isa.-
